sábado, 12 de abril de 2014

Need for speed


¡Qué prosa, qué poesía, qué elegancia y qué sutileza! Toda una proeza del cine, un canto a la libertad. ¡ups! Nos hemos equivocado de película.

Need for speed quizás no sea brillante, pero es muy entretenida. Bueno, tampoco. ¿Qué es Need for speed entonces? Pues son una panda de flipados (con mucho corazón), que se pasan el día arreglando coches en el taller para después hacerlos picadillo en  las carreras que organizan. Cualquier excusa es buena para rivalizar y hacerse el chulo.

Los más destacable, por falta de brío, son los diálogos, situaciones y personajes. Nunca llegan a cuajar ni hacerse creíbles ese cúmulo de caras y expresiones, que llegan a ser patéticas y muy, muy estereotipadas. Ni a Aaron Paul se le puede tomar en serio en su interpretación de chico duro y melodramático a la vez. El personaje femenino, interpretado por la próxima chica de las cincuenta sombras, Dakota Johnson, es inteligente pero ya está, es la figura del hombre quien lleva el volante durante toda la película, mientras ella ejerce de sumisa casi en todo el desarrollo.

Otro de los puntos fuertes es la lealtad y la amistad, que quedan descritos muy simplonamente y que sirven básicamente, para hacer bulto y acompañar a Aaron en las carreras. Bueno, y las carreras, de hasta 14 minutos de duración, están llenas de dinamismo -incluso llegan a marear al principio con tanto cambio de cámara- consiguiendo ser monótonas e inverosímiles con cada adelantamiento y vuelo de campana. El rugido de los motores nos acompañaran en cada escena de carretera, incordiando con ese sonido intenso de motores en celo, pero que al menos está más justificado que la música que le ponen para dramatizar y dar forma a los sentimientos manidos del elenco.

Una película sobre velocidad que se hace lenta, con muchos coches de diseño y poco más, que podrá satisfacer a los aficionados del videojuego pero que no convence al publico ajeno a él.
Para concluir vamos a citar una frase que dice Michael Keaton, y que se queda en eso, una bonita frase:
"Correr es una ciencia, pero correr con pasión es un arte".


Por todo ello te damos 1'5 puntos de cruz.