Segunda parte que adapta la saga literaria Divergente y que contínua en su empeño de defender esas distopías guerrilleras, adaptadas para los jovenzuelos, donde opresión e injusticia comienzan a ser solventadas por la rebeldía de unos héroes normales, lo suficientemente valientes para movilizarse y plantar cara a tal modo de represión y a esos malos que aparentan simpatía, pero no. Pero entre escena y escena se dejan entrever ramalazos de amor adolescente y mucha acción.
Es significativamente mejor que su predecesora, sobre todo en términos de desarrollo: ya no es tan obvia en cuanto a la direcciones que le esperan a los personajes pero no es difícil adivinar el resultado de cada escena y de cada persecución. El tono intenta alejarse de tonterías y los efectos especiales están bien conseguidos pero lamentablemente las escenas no están narradas con la suficiente emoción para que el resultado sea plenamente sorprendente como se pretende.
EN RESUMEN:
-Nos alegra que decaiga el romance y nos aburre que en consecuencia sobresalga el drama maternal una y otra vez.
-No entendemos el corte de pelo que el personaje de Shailene Woodley se hace en un arrebato Mulanero.
-Son muy pesados con las pruebas... ya le dedicaron una película entera a ese tema y aquí erre que erre con lo mismo. Vale, son necesarias, pero ¿y su duración?
-Y bueno, nos gusta alguna nueva incorporación al elenco, pero la ilusión dura poco.
P.D: El cártel no nos gusta nada, pero hemos de decir que defiende perfectamente el contenido al que se refiere. Theo James y Woodley cayendo, subiendo o lo que quiera que estén haciendo en postura acartonada, con cristalicos de por medio para que se vea claro que encontraremos movimiento y acción la cosa y ya las pistolas, en la mano de los protagonistas, confirman para nuestra desgracia que la película no será un musical sesentero a lo Marisol. Luego están sus caras de "Dios Santo, ¿qué estamos haciendo con nuestra vida y por qué nos hacen parecer tan inexpresivos?" sobre ese cielo con filtro de estilo Nashville que remata la jugada publicitaria.
Le damos 2 puntos de cruz.