viernes, 4 de abril de 2014

Noé


La película comienza con un sermón bíblico a modo de reprimenda de la historia de los pecados del mundo. Después de eso nos encontramos con que Russell Crowe hace de padre de Russell Crowe, lo que nos parece bastante siniestro. Nos encontramos con que Anthony Hopkins hace de Matusalén en un personaje que ronda los 720 años (Génesis 5:21-27). Con que los marginados, Emma Watson y Logan Lerman, se vuelven a encontrar. Con una bso bastante buena y con un malo muy pesao'.


Viendo esta película nos damos cuenta de que la Biblia debe ser una novela de ciencia ficción bastante wappa y predecesora de los best sellers contemporáneos. La visión de Darren Aronofsky es intensa y obviando lo absurdo de la historia, (o al menos eso nos parece a nosotras), la cinta la encontramos cuanto menos de calidad pero notamos que el reparto es lo suficiente capaz como para que sus roles hubieran sido más potentes, o al menos más desarrollados como nos tiene acostumbrados el inspirador director.

Algo que creemos remarcable son las diversas escenas realizadas mediante stop motion (o alguna técnica similar), que son muy bellas y repletas de información condensada y resumida, fácil de asimilar y que dota de fluidez la narración.

Y ahora abrimos debate:
No nos hemos leído la Biblia así que no sabemos mucho de ésta o del argumento, pero... ¿Qué pasa con los peces? Cuando llueve es agua dulce que se mezcla con la salada, lo que se traduce en un potingue donde la vida acuática es imposible de asimilar.

1 minuto de silencio por las truchas del océano pacífico y el ajolote de los lagos de México.

Hemos llegado a la conclusión de que los salmones son los reyes, y no hay más que hablar.


Volvemos a abrir debate:
¿Cómo es posible que el agua después del diluvio se dividiese en ríos y mares si estaba mezclada?

Y volvemos a abrir debate:
Si todos venimos de Adam y Eva (o Eva y Adam, para las más quisquillosas), y sus hijos procrearon entre ellos...
El resto de generaciones somos realmente retrasadas, por el tema de la genética y esas cosas. Lo que conlleva que Adam y Eva eran jodidamente listos.

Cerramos debate. Pero que conste que somos super devotas.

En fin... Qué película más bonita y cuantas incongruencias tiene el tema, porque Aronofsky no tiene la culpa, ya que él  ha variado poco en su versión excepto por la introducción del personaje de Emma Watson. Todas esas cosas de los monstruitos de piedra que quedan tan bien y el malo malísimo tienen bases bíblicas.


Te damos sobre un tsunami 4 santísimos puntos de cruz.